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Lupine
Como pegar de la buena despues de emigrar

Thursday, January 20th, 2022

Oia, gente entrando a LIA y yo acá amasando el pionono. Me colgué un toque pero les voy a escribir algo como un regalo de Navidad, en Febrero, como solemos hacer las cosas acá.

¿Vieron como se puede medir la economía de un país averiguando a cuanto esta el Big Mac? Bueno, yo creo que podemos medir que tal me fue en Inglaterra desde que me mude hace 10 años, basándonos en la calidad de la marihuana que consumí y a quien le compre. La vamos a medir con el sistema de Tiers o escalones que usan los ponjas en los jueguitos porque la tienen re clara y saben todos los trucos. Por si no conocen, el sistema de tiers va de peor a mejor usando estas letras: E-D-C-B-A-S o sea el ABC clásico de las notas yanquis pero con una S de Super en el primer puesto porque con esa quedo super puesto.

Tier E: Brady

Durante los primeros meses en UK allá en el 2012, estaba sobrio y llevándola re bien. Los dos primeros días en Inglaterra después de fumar faso diariamente en Argentina fueron duros y molestos, pero al rato ya no sentía la necesidad de quemar una caña. Además, tenía mucho de que encargarme porque emigrar es una paja y hay que hacer de todo, así que me mantuve ocupado.

2 o 3 meses mas tarde tenía una rutina, tenía embole, y quería mandanga. ¿Pero de dónde sacar? Estaba parando en lo de Bicho en ese momento pero él no tenía ni conseguía, creo que estaba con una novia medio cobani, la verdad que no me acuerdo, pero la cuestión es que no podía pegar por el lado de amigos. Tenía que salir a buscar mi propio faso como un neandertal.

No se cuánto me duró esta busqueda pero lo cierto es que debía estar emanando algo, una feromona que solo un buen dealer podía oler, y una mañana me encontraba fumando un pucho (no dejaría de fumar cigarrillos hasta el 2016) en la puerta de mi café favorito, cuando se me acercó un negro, de unos 50 y pico, bien flaquito y vestido medio ciruja, que es como me visto yo también así que no estoy juzgando. Posiblemente le sacamos la ropa al mismo muerto.

El hombre, después de dar un par de pitadas, me pregunta si quiero “grass”. “Solo del que se fuma” le dije. Al toque el chabón sonríe con sus 7 dientes y me dice “aight fam I hook you up don’t you worry” que significa “te voy a recontra cagar pero no te queda otra porque tengo tu medicina gordito”. Me dice que lo siga y lo sigo. Yo tenía el día libre porque todavía no había pegado laburo, pero tampoco quería comerme un garrón, así que subí un poquito la paranoia, por si acaso. Por si refresca. Nos pusimos a caminar y a la vuelta, en una calle con menos coches y sin locales, me dice “Wait here” y se manda a un departamento en un sotano. Toca la puerta, abre un tipo con la peor cara de orto, y se mandan para adentro. Al rato sale drogado, me pide 10 mangos y me da una bolsita con faso. ¡Finalmente! ¡Para esto me mude al primer mundo, para fumar de la buena y reírme de la prole! Miro la bolsita y era un puto paragua. Lo miro y le pregunto “Che ¿y flor no tenes?” y me dice “No, malísima la flor, te deja de cama, con esta podes estar todo el día a full, no te tumba, además te hace hablar en perfecto español como yo ahora” y le dije “Sounds good fam” porque yo no había fumado todavía.

Contento porque pegué, pero triste porque pensé que en el primer mundo el faso era siempre el mejor y al final me mude al repedo, me puse a caminar de nuevo para la principal con el tipo que ahora se presentaba como Brady, para que lo agregue al celular. Apenas pasamos por un kiosko Brady me pide 5 mangos “prestados” para comprar un par de birras. Se los regalo porque soy bien piola y mostrar que te sobra la plata es lo mejor que podes hacer cuando conoces gente en la calle. Me dice “¿Queres venir a casa a fumar? Dale venite” y me da una palmada en la espalda mientras me encuentro caminando para su casa.

Me dice que la casa es 2 cuadras para adentro, “2 cuadras para adentro me la vas a dejar”, pienso. Apenas me alejo de la principal y bajamos por una calle vacía, subo la paranoia a 200 grados y la pongo en el estante del medio. Yo seré un temerario, pero a veces en la vida hay que frenar un toque y pensar: Si yo ahora me muero o me afanan tanto que me quiero morir, cuando lo cuente me van a preguntar “¿Pero sos boludo?”? ¿Tendría que ir averiguando por si me preguntan?

Mientras me preguntaba si era medio idiota estar por meterme en la casa de un tipo extraño en un barrio nuevo sin que nadie sepa donde estoy, aparece a la vuelta de la esquina una piba de unos 14 años en su uniforme escolar. Desganada como buena adolescente, cuando nos ve pone cara de 😩 y se nos acerca. Brady me dice “es mi hija”. La nena era negra, pero te la imaginaste blanca porque sos racista. Mientras Brady la bardea por quedarse después del cole “con algun muchacho”, vamos los tres para la casa y yo mucho mas tranquilo porque no me iba a hacer nada en frente de la hija, ¿no? Además una escena cotidiana tan tolola como un padre haciendo pasar vergüenza a una hija no encajaba en un relato donde me terminan acuchillando. Me relaje. Llegamos a la casa y pasamos el umbral de entrada. No había vuelta atrás. Me full olvidé de avisarle a alguien donde estaba.

Subimos una escalera interna hacia el departamento de Brady y al entrar, la nena sube otras escaleras, se mete en su cuarto y cierra la puerta para no ser vuelta a ver. Brady me indica el camino hacia la cocina, que no tenía ninguna otra salida. Justo antes de entrar miro al living y me freno un toque porque el tipo tenía la tele y equipo de audio mas grandes que vi en mi vida. Todo el resto de la casa era de humildad trabajadora que haría sonreír al General, pero la tecnología del living era de narco. Brady me ve los ojitos y me mete para la cocina rápido, antes que hiciera muchas preguntas. Me metí en esta cocina larga y estrecha, me senté en una silla al final de la misma y Brady se puso bloqueando la salida.

¿Y saben que pasó? Nos armamos alto cuete y nos cagamos de risa charlando gilada porque así es la lechuga del diablo. Brady me decía “Me voy a hacer malasangre yo? Tengo un techo sobre mi cabeza, tengo mi mujer, tengo mi yerba, todo lo demás es gilada”. Se olvidó de la hija pero igual tal cual, me decía esto mientras nos fumabamos un paragua nefasto pero que después de 3 meses pegaba como una mula hecha de Babylon y yo también me sentí agradecido a la vida. Y pensar que una media hora antes estaba pensando que capaz me iba a hacer daño. ¿Por qué lo prejuzgue?¿Por negro?¿Por pobre?¿O porque vengo de un país donde todas las veces que me pudieron cagar me cagaron? No sé. Ojala no sea ni por racista ni por cheto, solo por Argentino. Pero lo importante es que no me dejé llevar por mi miedo y me animé a una experiencia nueva en un lugar extraño, y solo me tomó un poco de coraje y ser varón para en ningún momento temer a que me violen. Privilegio: Chequeado papu.

Media hora mas tarde me fui, no sin antes ver en la pared un cuadro de Bob Marley como quien tiene una estampita del Gauchito Gil, mismo estilo, misma reverencia. Era Jamaiquino el Brady. Le conté que en Argentina lo full queremos a Bob y creo que lo vi sonreír mas que toda la tarde. Nos dimos un abrazo y me fui de ahi con una punta, con una bolsa, y ¿quizás con un amigo?

Bueno no, este drogón hijo de puta terminó siendo alto ancla. ESO ME PASA POR ESPERAR LO MEJOR DE LA GENTE. Primero arrancó llamándome al laburo, a las 9.30 de la matina o por ahí. No es que tenía el número de la oficina, pero si me llamas en horario laboral un Lunes, voy a tener a mi jefe cerca. Me levanto mientras hago la caminadita apurada de que querés atender pero sin que alguien te escuche, salgo al pasillo, atiendo y me dice un montón de cosas que no les puedo traducir porque no hablo el idioma original. No me refiero a Jamaiquino sino al dialecto que hablás a las 9.30 de la mañana cuando ya estas borracho porque todas tus decisiones son malas. En esta extraña lengua, que empiezo a captar de a poco, entiendo al final que me propone una venta. “Brady te compré faso ayer. La verdad que no necesito menos de 24 horas después.” Okok me dice, y mientras se pone a balbucear alguna otra gilada de despedida, puedo escuchar como trata de recuperar la baba que estuvo vertiendo a un costado de su boca desde que me llamó. ¿Éste es el nivel que merezco? ¿Y si me viera La Reina?

Después me fue aumentando de 10 a 15 a 20 mangos el paquetito, y no es que se ponía mas grande o mas rico, así que ya era hora de buscar otra punta y rápido. La última vez que lo vi me dijo que edite su contacto en mi celular porque se había cambiado el nombre, para despistar a la cana me dijo. Ok, voy y edito el nombre. “Como te llamás ahora?”. “B” me dice el campeón. Bless him. Tiembla Scotland Yard.

TIER D: Happy Joe

A las puteadas con todo esto, escucho de queruza a un tano en el laburo hablar de marihuana y una vez que nos quedamos los dos tarde, aprovecho y le pregunto quien es su dealer y si quiere tener mas amigos. Me dice que le pregunta pero que no deberia haber drama, que si voy con el y me lo presenta, mejor. Quedamos en esa.

Unos pocos días mas tarde nos volvemos juntos del laburo y me lleva a un off-licence que es el equivalente a un chino, pero típicamente lo atiende un indio, porque es todo diferente afuera viste. Entro y me presenta al kioskero: Happy Joe, quien me saluda con una sonrisa porque está always on brand. Le compro unos caramelos, unas sedas, y 3.5 gramos de marihuana como debería ser en todo país civilizado. Intercambiamos números, me mete todo en una bolsita y salgo por la puerta. Apenas encuentro un callejón miro la bolsa y veo una deliciosa flor. Ahora sí papá, yo no viaje miles de kilómetros para andar fumando de la mala. Los ojitos se me pusieron como Comegato de Condorito, que es tipo como que se te haga agua a la boca pero los ojos.

Cuestión que la probé y era bastante rica, a un precio razonable, y super cómoda la transacción. El almacén este me quedaba un poco lejos, tenía que tomar un subte en hora pico y era un alto garrón, pero no me importaba nada porque me había logrado deshacer de Brady, que ya estaba muy cargoso con los llamados. Le bloqueé el número, nunca más volví a sus pagos, y listo. Nada podía salir mal con Happy Joe.

Entonces ¿Por que está en Tier D? Primero que Happy Joe capaz era tan Happy porque estaba siempre fumado y como buen fumón era un colgado: A veces yo caía al kiosko y estaba el hermano, un pendejo que no sé si sabía lo que hacía Joe para ganar unos mangos. Y yo entraba, le compraba unos chicles, salía, y me quedaba muy decepcionado con la transacción. Eventualmente se despertaba el chabón y me mandaba a alguien o nos encontrábamos a la vuelta. Pero bueno, al menos eventualmente aparecía, si lo esperaba una hora como un perfecto imbécil.

Hasta una vez que no me contestó los mensajes por una semana y finalmente me dice “Disculpá que no te respondí antes pero mi celular lo tenía la policía”. “Ah macanudo” pensé yo, mientras recordaba todos mis mensajes onda CHE JOE TE QUIERO COMPRAR DROGA TENES DROGA PARA MI? SACO CASH AHI AFUERA DE TU LOCAL DONDE VENDES LA DROGA. Le estaba por responder “Buen intento, polizonte” y tirar el celular a la basura pero me agrega “me robaron la moto y fui a hacer la denuncia pero necesitaban mi celular para <algo que sinceramente no me acuerdo>”. Cuestión que la cana no lo tenía como un dealer al parecer, pero igual me dio la pauta que tenía que andar con cuidado cuando texteo. Le pedí media onza de la buena la mejor on the spot.

Otro día caigo, me da la bolsa, todo en orden, y me dice “¿Te puedo mostrar algo abajo?” y me señala las escaleras del local que daban a un sótano. “De una” le digo y bajo con él a un especie de depósito, intrigado. ¿Tendrá mas faso? ¿Tendrá faso especial para sibaritas como uno? No. En el depósito este había mil cajas de mercadería y en el centro de la habitación, un equipo para hacer pesas de esas que te acostas y agarras el palo ese con las pesas y viene un chango a mirarte y hace que agarra el palo pero no lo agarra y te dice cosas de fitness tipo “duro duro duro” o capaz era Tu Sam ese. Cuestión que Joe me dice “Lo estoy vendiendo, te interesa?”. Lo miro con confusión y le digo “Joe, la última vez que hice pesas fue levantando mi obeso cuerpo de la bañadera, que te hizo pensar que necesito equipo de gimnasio? ¿Como lo voy a sacar de acá? Joe ¿NO PODES PENSAR?”. Se lo dije super comprimido igual con un “lol no” pero porque tengo el don de la síntesis.

Sintiéndome un poco incómodo por decir “lol” en voz alta como un idiota a alguien que conozco poco y nada, de repente nos interrumpe el grito de la madre de Joe que nos grita desde arriba. La madre a veces atendía el local y esos eran los peores días, porque cuando estaba el hermanito al menos le podía preguntar “¿tu hermano está en la casa?” pero a la vieja no. Encima siempre me miraba con cara de orto mal. ¿Sabía que le compraba ganja a su hijo? Nunca supe. Volviendo al sótano, la vieja nos grita algo en Punjabi y Joe se pone nervioso y le contesta algo, al toque diciendome por lo bajo “pretend you’re not here”. “Joe qué carajo – bajito le digo – querés que haga si baja? Me pongo a hacer pesas?” “sí” “lol ok” y lo volví a decir la puta madre.

Por suerte después de un momento de tensión donde si bajaba la vieja yo simplemente me iba a disculpar y subir por la escalera detrás de ella con cara 4 de Yo, Argentino, resulta que se había ido y pudimos volver a subir. La verdad que me hubiese quedado con el bueno de Joe pero me mudé y de repente era como una hora entre pitos y flautas ir hasta ahí, y tenía la jodita que en la puerta del subte que me dejaba, había siempre estacionado un camión de la policía que creo era de los que llevan perros. Capaz que ni daba.

TIER C – Faso

Mientras que Happy Joe no estaba mal, pronto surgió otra opción. Se dio en esta época que Bicho cortó con la novia y se mudo a Whitechapel, a unos 20 minutos de subte de donde estaba yo. Cuando arranqué a contar dije que estaba parando en lo de él pero que Bicho no estaba fumando faso en esa época. Bueno, cuando cortó con la otra que tenía el corazón ortiva, se volvió a acordar de lo artesanal. El primer día después de mudarse, al salir a comprar papitas se encontró con un pibe que le ofreció marihuana así nomas. Dale le dijo Bicho e intercambiaron números.

La primera vez que lo fui a visitar al depto nuevo me cuenta esto y pruebo el faso. ¡Estaba bastante bien! Y encima a 20 minutos de casa, con la excusa de visitarlo a Bicho cada vez que compro, y no me tengo que comer el viaje al kiosko de Joe que todo bien pero no era tan cerca. Le pedí a Bicho que le diga a este chabón que lo iba a agregar yo, y unos minutos mas tarde me estaba encontrando con él en la puerta del depto de Bicho. Era un pibe pakistani joven de alrededor de 20 años pero podía tener 17. Cayó en un Audi negro, me metí en el asiento de acompañante, intercambiamos producto por efectivo, y me bajé. In and out, 20 segundos. ¿Sabés como quien? Aaaah te pensás que voy a hacer la obvia ¿no? Te quedás con las ganas wacha, estoy para más.

Cuestión que nunca supimos el nombre de este pibe y nunca le preguntamos, porque una de las cosas que encontré al mudarme a UK es que cuando dos inmigrantes quieren comunicarse en inglés, es todo una paja. El mensaje es traducido dos veces y por mas que me haga el guacho bilingüe, entre los acentos y la poca predisposición de ambos a continuar hablando después de mas de 3 “What?”, la conclusión es que mejor hablar poco y nada. Así es que lo agendé como Faso en el celular y así será inmortalizado.

Faso podía ser Tier B o A la verdad. Cada vez que iba a lo de Bicho le mandaba un mensaje y el chabón caía al toque. El precio estaba en los estándares del mercado según el Washington Journal. El pibe me hacía esperar poco y tenía varias cosas; me ofrecía Molly o Charlie que son cosa de jóvenes y yo no quiero pegar pasti y estar reloco bailándole a una columna, quiero darle a la ganja como hacía Jesús de Nazareth y escuchar rock progresivo mientras pienso en mis remordimientos. Pero igual, lo banco por ir al upsell.

El problema surgió cuando me mudé fuera de Londres porque estábamos por tener un bepi y tenía sentido mudarse a la suburbia como buen paterfamilias. Caímos en un pueblo que nos encanta entre Reading y Londres que no voy a nombrar para que no me encuentren tan fácil los accionistas, pero voy a llamar Irontail porque suena una onda así.

Cuando me quedé sin faso en Irontail me di cuenta que para pegar con este pibe de nuevo tenía que tomarme un tren a Londres, de 45 minutos, y de ahí cruzar toda la ciudad. Inviable. Por suerte Faso, que como dije era alto entrepeneur, estaba estrenando su servicio de Delivery a ciertos códigos postales. Le pregunté si podía llegar a Paddington que era la estación de trén a la cual llegaba en Londres, y me dijo que sí. Con esto al menos ahorraba el cruzar la ciudad, que era una paja mas colosal que a los 15 cuando volví a casa después de mis primeros besos.

Lo hice una (1) vez y ya me quería matar. Primero que no era a la salida de Paddington, era a unas cuadras. Una vez ahí lo tuve que esperar 40 minutos. Cuando finalmente apareció, con mil flacos en el auto como siempre (me hacía acordar a ciertos personajes de No vuelvo más a Ramos, true story), me dio unas poco sinceras disculpas y me dio la bolsa que siempre parecía mas chica de lo que esperaba. De ahí a casa, 45 minutos más de tren, sin contar tener que esperar a que salga que podían ser 20 minutos más. Y con un pibe en camino. Malísimo, así que Tier C por más que las circunstancias que cambiaron fueron las mías.

Acá les dejo un screenshot real de una obra en 4 actos:


Tier D: Otro Faso

Siguiendo el patrón tendría que estar Tier B acá, pero C-C-C-COMBO BREAKER. Lo que pasó es que en algún momento después de que naciera mi hijo, y una vez que la vieja rutina se adaptó a la nueva vida y todo se hizo un poco mas relajado, era hora de drogarme de nuevo (pero ahora cuando se duerme el pibe) y estaría buenísimo no tener que estar todo el día afuera para conseguirlo. Lo cierto es que no podía irme ni una hora sin que me jodiera dejarla a mi mujer sola con nuestro hijo porque no es joda y mucho menos el primero, no tenés idea y los primeros meses te meten en la cabeza que esta todo bien y va a estar todo bien pero si hacés alguna cosita mal capaz se muere pero fuerza papus. Después de los 6, 8 meses hay ciertas cosas que ya no hay peligro que pase y como dije, te relajas un poco. Bueno yo me quería relajar MÁS.

Me puse a pensar de donde saco faso en mi nuevo pueblo. Se los veía a todos bastante caretas caminando por la principal. Pero había 1 hobo en el pueblo, siempre el mismo, como en el Stardew Valley, lo cual era tán pintoresco que me llenaba de goce. Nuestro hobo era un pibe joven, de unos 20 años diría, full barbudo y de pelo largo, que a veces andaba con una guitarra pero nunca tocaba. Una vez lo vi armando en el fondo del parque que teníamos frente de donde vivíamos, y dije esta es la mía.

Me crucé el parque, me acerqué respetuosamente, y me senté con él. Me presenté, se presentó como James, y me ofreció quemar. ¡Era tan fácil al final! ¡Haberlo sabido antes! Al toque le dije que andaba buscando comprar, y que si tenía una punta. Me da el teléfono de un pibe, lo texteo, y quedamos en encontrarnos en otro parque. Pero me dice que me apure. No me aclara por qué.

Voy corriendo hacia el otro parque como si se hubiese accidentado un amigo y cuando llego escaneo la zona. Lo texteo de nuevo avisándole que llegué. Veo en un banquito a 3 pibes, posiblemente de 18 o 19 años, quien sabe. Uno de ellos me hace una seña. Apenas me acerco un de ellos se va. Tras hacer un poco de small talk, vuelve el que se fue y me pasa la bolsita. Agradezco, y me voy.

El faso era bueno, tendría que ser B, hasta A a veces. Creo que con él pegué el primer Silver Haze que es una cepa que me encanta. La tiro acá así ya saben que regalarme en Reyes. ¿Pero el servicio? Cada vez peor. Un escándalo. Un abuso. Te las tiro así una atrás de otra:

  • Después de textear back and forth por un buen rato y citarme en la plaza, apenas nos encontramos y ponemos a caminar juntos, me dice “Quien sos quien te dio mi numero” con cara de 😠. Le digo “Drogón, ya te compre unas cuatro veces” pero en vez de drogón le digo “Mate” porque manejo el vernáculo, a lo cual le cambia la cara polarmente y me sonrie como si se acabase de acordar que le chuparon la pija. “Ah ok 😂” concluye. ¿Capaz en esta línea de trabajo, hay que poner cara de bull dó? Ok todo bien. Al mes me encuentro de nuevo y todo normal. Al otro mes me pregunta quien carajo soy. Bueh.
  • SIEMPRE estaba apurado y me apuraba. “Hurry up mate” me decía. Y yo como un boludo tomándolo como una entrevista de laburo y no un pendejo drogadicto que no me va a decir a mí como hacer las cosas o a que ritmo. Una vuelta me hizo correr 7 cuadras a una plaza para decirme que se había ido donde estaba yo, en auto, y que donde carajo estaba. ¡Me fui a la plaza donde me dijiste que estabas la puta que te pario! Me contesta que vuelva y QUE ME APURE porque no puede estar ahí mucho tiempo con el producto. Pero la puta madre, volví corriendo las 7 cuadras y cuando lo veo me dice “why u sweating mate”. Bueh.
  • Una vez estuvo como 2 semanas sin contestar. Al final le compré a uno de los amigos que me lo crucé en la plaza, pero sabés por qué no me contestaba? Porque lo habían apuñalado. Bueh.
  • Como siempre estaba con amigos, pasó que la segunda o tercera vez que me citó en el mismo parque, llegué y di una sutil mirada inquisitiva alrededor. Una que los normies no detectarían, pero la gente piola y cualquier policía identificarían como que buscaba comprar falopa. Veo, a lo lejos en un banco, tres pibes de descendencia Bangladesi. Me muevo con esa incomodidad de no saber para donde mirar y me voy acercando a estos 3 pibes sentados en un banquito de plaza y otro parado, todos ellos mirándome sin decir nada. Cuando estoy cerca y levanto la mirada me doy cuenta, con disimulado pánico, que no tengo idea quienes son estos pibes pero NO son Otro Faso o sus amigos. Me freno y me quedo mirando al que está parado. No sé que decir. No tengo ninguna excusa para estar hablándoles a estos jóvenes y francamente me avergüenza que los vi marroncitos y dije “ahí están mis narcotraficantes”. Mientras me estoy revolcando como un gato gordo en mis prejuicios clasistas, el pibe me dice “Wanna buy some grass mate” y me demuestra que la culpa no es mía. “Actually” contesto con una sonrisa y prosigo en narrativo español, “le estaba por comprar a otro pibe, pero si me das tu número te agendo.” Ok me dice el pibe y cuando le pregunto bajo que nombre lo agendo, lo piensa un rato, y me dice “Ace”. Nunca lo llamé a Ace, pero estaba bueno tener un plan B, me daba seguridad. Y nada de esto es una contra de Otro Faso pero quedó en la lista y hago lo que quiero porque la página es mía.
  • Desde la segunda o tercera vez en adelante que me junté con OF, además de cambiarme la locación a cada rato, cada vez tardaba mas en aparecer. 15 minutos, 20, media hora. El día que me hizo esperarlo literalmente una hora, con sensación térmica de unos 2 grados, dije basta. Me calenté mal y tomé una decisión: Cuando escriba sobre esto lo voy a poner en Tier D. Se va a querer matar cuando su novia latina que lee LIA le cuente.

TIER S: Irontail Cannabis Club

No se como ni por qué se me ocurrió buscar un club de marihuana local, pero tuve el ojete que cuando googlee al respecto, dos semanas antes había sido fundado uno, con sede en mi pueblo. El club se llamaba algo así como Irontail Cannabis Social Club en Instagram. Los seguí, mandé un mensaje, y me comentaron que iban a hacer la primer juntada próximamente.

El día del primer encuentro del club, yo estaba ahí antes que los fundadores, esperando en la puerta. Nos juntábamos en una gran habitación que había al fondo de una iglesia de Quakers, que son unos religiosos de acá que te hacen el re desayuno. Parece que los Quakers están en contra de la criminalización del faso o algo así porque nos dejaban juntarnos ahí, aunque los dueños del club les habían dicho que éramos un club de CBD. Tomatoes tomatoes.

Pronto llegaron los fundadores, dos tipos de unos 40s que me hicieron pasar a la cocina y me preguntaron que estaba buscando. Les dije muchachos, yo también tengo casi 40 y no estoy en edad para estar esperando como un pelotudo en un estacionamiento, cagado de frio, a un pendejo de mierda que me trata como lo tratan a él en la panchería. Se rieron y me dijeron que me entendían perfectamente, y que por eso fundaron el club, para que nos juntemos y nos ayudemos mutuamente. Me aseguraron que al final de la reunión me iban a pasar el número de un tipo confiable y serio. En ese momento un ángel recibió sus alas, y se las fumó.

Pasamos al fondo, cruzando el patio, y nos metimos en una gran habitación. Estaba sonando reggae, por supuesto, y había unas 10 sillas en un semicírculo tristón. En una mesa había unos chizitos, y un par de cocas. Cuando llegaron otros 3 o 4 tipos mas, la escena se veía tán atractiva como una reunión de consorcio, pero con elementos de un cumpleañitos soviético.

Sin embargo nos fuimos armando de coraje y armando unos fasos, y al rato estábamos riéndonos y contando gilada. Una vez en confianza cada uno de los presentes abrió su mochila y sacó alguna de sus flores para mostrar con orgullo. Y yo estaba ahí para decir “oia a ver esa la puedo probar jeje soy argentino maradona messi” y al rato terminaba del orto mal. Cuando uno de ellos me introdujo a los concentrados, que es como suena, me pegó como ya no me pega. Así que me puse muy contento al recordar como se sentía estar bien del orto. A todo esto al segundo encuentro del club, cuando comenté este asunto, uno de los SOCIOS FUNDADORES del CLUB DE MARIHUANA del condado me dijo “Si, la verdad que cuando te conocimos nos diste la impresión que eras como…” dudó un segundo, “…como una puta vieja”. True story.

Después de bajarme la app Wickr que es tipo un Whatsapp que te borra los mensajes a los pocos días, estaba listo. Primero me pasaron el número de Bear, que cuando le pregunté si tenía faso para vender me dijo “estoy reloco en Ibiza que se yo”. Le pregunté a mi club de nuevo y me pasaron el número de un chabón local. No voy a usar su nombre profesional por si se googlea, pero llamémoslo El Drogas. Lo contacto, me responde todo bien, le pido un menu, y me manda una lista con SETENTA Y CUATRO CEPAS DE FASO.

Esto es un pedacito nomas

¿Donde la guarda? ¿Como tiene mas Variedad que la fábrica de Terrabusi? Le pedí Silver Haze y para probar unos Skywalker OG y Jungle Cake. El chabón cayó en auto a la puerta de casa a la hora y minuto charlados. Me subí, “hola hola que tal acá esta la plata gracias gracias sisi lo voy a disfrutar jeje” y listo. Segundos me tomó todo, versus UNA HORA con el otro forro. 70+ gustos para elegir. Bueno, es carísimo el hijo de puta, pero es Top Shelf. ¡Y que servicio! Así que ni la legalicen, mirá. Yo ya gané.

Se terminó el update pero les recuerdo que si quieren pasar por el Discord de LIA que es como el viejo foro pero mejor porque estamos viejos y cansados, el link está en el update anterior. Si sos medio rancio ni entres igual porque estamos mas deconstruidos que una palangana de Legos besitos xoxoxo